Cuando te tocó pasar el proceso, ¿te sentiste solo o sola?
¿Sabías que en medio de ese desierto es cuando Dios te cargó en sus brazos? Nada escapa a la voluntad de Dios: Él tiene el control por sobre todas las cosas y siempre nos va a dar una palabra para alentarnos en medio de la adversidad.
Te invito a abrir estas páginas y dejar que sea Dios quien te sorprenda en cada escrito poético y que, a través de ellos, tu vida sea totalmente transformada y te enamores aún más de la persona de Jesús.
Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos; aunque falte el producto del olivo,y los labrados no den mantenimiento, y las ovejas sean quitadas de la majada, y no haya vacas en los corrales; con todo, yo me alegraré en Jehová, y me gozaré en el Dios de mi salvación.
(Habacuc 3:17-18)