La progresiva importancia del conocimiento como apoyo fundamental para la
eficiencia y el desarrollo de las organizaciones, ha sido tema de investigación por
parte de varios estudiosos a lo largo del tiempo. Es innegable el valor relevante
que ha tomado la sociedad de la información y del conocimiento para el progreso,
no solo de las organizaciones, sino de los países en materia de competitividad
e innovación (Nonaka y Takeuchi, 1999; Donate y Guadamillas, 2009). Es por lo
anterior, que se consideró fundamental el estudio de la gestión del conocimiento
y sus pilares (organización, liderazgo, tecnología y aprendizaje, según Stankosky
et al., (1999) en el campo empresarial, específicamente, su aplicación en las Pymes
del Valle del Cauca. Según la investigación teórica realizada, el conocimiento
es un recurso intangible que posibilita interpretar el entorno y permite actuar
(Canals, 2003), para mejorar el desempeño de las organizaciones en un entorno
cada vez más cambiante.